Enseñando la Fe
El Memorare es una hermosa oración a la virgen María, esta oración es parte de nuestra tradición católica. Santos como la madre Teresa de Calcuta solían rezar esta oración y repetirla nueve veces como una novena corta pidiéndole ayuda e intercesión a la Virgen. La Virgen siempre intercede por nosotros. Pidámosle con fervor que nos ayude y nos mantenga a salvo de toda enfermedad corporal y espiritual. Los invito a orar y mediar con esta oración.
Memorare
Acordaos, oh piadosísima Virgen María!,
que jamás se ha oído decir
que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando tu auxilio, haya sido desamparado.
Animado por esta confianza,
a Vos acudo, Madre, Virgen de las vírgenes,
y gimiendo bajo el peso de mis pecados
me atrevo a comparecer ante Vos.
Madre de Dios, no desechéis mis súplicas,
antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente.
Amén.
Mensaje pastoral
Mis hermanos y hermanas,
Saludos a todos en la Divina Voluntad de Dios. Espero y rezo para que todos ustedes estén bien. Durante este tiempo de Pascua les quiero recordar, que somos personas de esperanza y estamos llamados a vivir con la esperanza de la resurrección, la esperanza de un día poder alcanzar la vida eterna que Jesús nos ofrece, no podemos vivir con miedo. La Biblia nos dice que la muerte es una consecuencia del pecado (Génesis 2:17).
Nuestro Señor Jesús es el médico Divino. Todos sabemos que la muerte es parte de la vida humana, eventualmente todos moriremos. Lo importante es estar preparados para ese día; estar en estado de gracia, arrepentirse, confesarse, dejar atrás el pecado.
Jesús es el médico Divino y solo él puede sanarnos del virus mortal del pecado que afecta nuestra alma. Por favor, no descuides el estado de su alma. No descuiden su vida espiritual. Si bien es importante estar físicamente saludables y disfrutar de la salud, es más importante estar en el estado de gracia con Dios. Porque nuestra alma es eterna, y si la descuidamos, podemos terminar perdiendo la vida eterna. Nuestro Señor Jesús nos dice en el Evangelio: "¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero y perder su alma?" (Mateo 16:26)
Como su pastor, es mi deber moral recordarles esta realidad espiritual. También es mi deber moral estar aquí en la parroquia disponible para que todos ustedes reciban los sacramentos, y aunque los servicios públicos no están permitidos por la crisis de salud que estamos enfrentando, siempre existe la posibilidad de recibir los sacramentos mientras se cumple con las autoridades sanitarias. Les ofrezco mis oraciones durante este momento difícil y sepan que siempre estoy disponible para brindarles los sacramentos y proveer por su bien espiritual.
Hasta que podamos reunirnos como parroquia en el Sacrificio de la Santa Misa. Muchas gracias a todos ustedes que han continuado ayudando a la parroquia durante este tiempo de crisis, gracias por su generosidad.
Que Dios los bendiga y los guarde, que haga brillar su rostro sobre cada uno de ustedes, que los mire con misericordia y que les dé por siempre la paz.
+Fr. Barrera